Letra de Juan José Correia
Música de Agustín Garnero
No me quejo si es mi vida instrumento del destino,
le protesto a tu falsía, vil mujer sin corazón;
a tus plantas me he arrastrado suplicándote cariño,
denigrándome la hombria por reconquistar tu amor.
He humillado mis derechos intentando conseguirte,
fui cual títere a tus cuerdas abatido de pasión,
fui cautivo de tus burlas por ser bueno y consentirte,
y a quien puedo culpar de esto si la autora fuiste vos.
Ebria de querer fuiste mia
y llorabas extasiada ante mis ojos
tus encantos virginales me ofrecias
enceguecida
de loco amor.
Nunca te creí tan malvada,
que has optado sin pensar este derrumbe,
malogrando nuestro eden con tu jugada
pero mi alma no sucumbe ..
perdió su presa el dolor…
I bis
Si algo puedo asegurarte, no protesto por derecho;
cuando sufras tus trastadas a tu hombre buscarás,
cobrarás al mismo precio los desaires que me has hecho
tus palabras redentoras no merecen mi piedad.
Yo se bien que a mis protestas le pondrás oidos sordos
pensarás que es una intriga que en mi pecho se anidó
nuevamente te recalco: pagaré del mismo modo
si algún día me precisas pero quiera Dios que no.