Cadena de oro (tanguillo)

Letra de Emilio «El Moro»
Música de Popular

Este humorístico tanguillo se canta con la misma música del conocido
«Los duros antiguos», que es asimismo base para otras muchas letras.
Emilio «El Moro», el famoso cantor cómico, le puso esta de su cosecha
particular. Incluye partes recitadas, que deben decirse con el acento
que se indica. Va todo con dialecto andaluz.

(Cantado)

Cuentan que murió Currillo,
y a sus chiquillos
dejó una herencia:
Una mesa y una cama,
y cuatro sillas muy viejas,
y una cadena de oro
que siempre colgá llevó.

A los dos o tres días
pa hacer el reparto,
los tres gitanitos,
muy calladitos,
entraron al cuarto.
El mayor de todos
se levantó,
y, borracho perdido,
así exclamó:

(Recitado, con voz de borracho)

Vamos al turrón. Veo menos que un muerto boca abajo. Aquí se va a
vender tó. Se va a vender la mesa, la cama, las sillas… Menos la
caena de oro, que esa la sudó pare, y esa es pa mí…

(Cantado)

Los dos gitanitos
quedaron callados,
con la boca abierta
y muy mosqueados.
Entonces, el de en medio
se levanta, y dice
que está de la herencia
hasta las narices:

(Recitado, con voz sorda y airada)

Pos sí, señor. Todo se va a vender. Se va a vender la mesa, la cama,
las sillas…Pero la caena de oro no se vende. Ésa la sudó pare, y
ésa es pa mí.

(Cantado)

Pero el gitanillo Pepe,
que es tartamudo, y es chico,
se dio cuenta del camelo,
se levantó y abrió el pico:

(Recitado, tartamudeando)

Pos…sí señor. To…todo se va…a vender. La…me…me…sa, la
ca…ma, las si…sillas… Y la caca…y la ca…y la caena de oro
que pa…pare sudó tantan…tanto, ¡También se vende! Y si alguno
queréis algo que pare ha sudao…

(Cantado)

Que se lleve los calcetines
que tuvo puestos
el mes pasao.