Letra de Eladia Blázquez
Música de Eladia Blázquez
Dedicada a Enrique Mario Franccini
Creo que ya sé cómo pasó:
una varita te tocó y el don nació después.
Vos hacés
la rosa y el jasmín
con sólo levantar el arco del violin.
Este es un chamuyo entre los dos,
porque te das y porque sos
doliente y fraternal,
vos que cornprendés porque sabés
desangrarte y después
otra vez empezar.
Me envuelve con un tul
la nota azul de tu violín;
me vuelve inmaterial
y siento ignal tu mundo afín.
Deja que versifique mi emocíón,
que explique la raión de tu latir.
No ves, hermano Enrique,
que hay que andar
tratando de volar para vivir.
No dejes de tocar,
dejame entrar en tu festín.
marea como el ron
el corazón de tu violín.
Vení, que nuevamente hay que ensayar,
subite al trampolín.
¡Y hablame en ese idioma
mientras vuelan las palomas
junto a tu violín!