Letra de Alcides de María
Música de Carlos Gardel
En un pingo pangare,
flete guapo coscojero,
buen herraje, lindo opero,
en direccion a Pigüe,
va el paisano Cruz Montiel,
orillando una canada,
con camisa bien planchada,
un clavel rojo retinto,
punal de plata en el cinto
y bota fuerte lustrada.
Voy en busca de un lucero
a quien le ha tendido el ala
y llevo el clavel por gala
en la cinta del sombrero…
Yo soy un criollo altanero
cuando de mi honor se trata
el valor se desbarata
ante el mas minimo antojo
y el puñal de aquellos ojos
con que mi prenda me mata.
La prenda se sonrio y luego
dijo en tono campechano,
pa’ vos… un mate en la mano…
ya tengo el agua en el fuego
a esto vengo y no lo niego
porque nunca se mentir,
lo que ahura se va a sentir
que la yerba no sea buena
eso no me causa pena
la pena es tenerme que ir.
Y sin hacer mas descargo
Juan Cruz Montiel con su china
se fueron a la cocina
a tomar un mate amargo,
un mate como de encargo
porque a solas lo tomaron…
lo que despues se juraron,
lo que alli se prometieron,
y lo que despues dijeron,
eso… a nadie le contaron.
Lo cierto es que Cruz Montiel
como era un criollo jinete,
monto de un salto en su flete
y despacito se fue…
y cuando ya el pangare
al galope se tendia,
de cuando en cuando volvia
la cara para mirar
si llegaba a contemplar
a su amada todavia.