Letra de Nelson Pilosof
Montevideo, 13 de octubre de 2002.
¡Cuántas veces nos sorprende
sin pensar lo inesperado
que a la intimidad se prende
cambiando aun lo imaginado!
Decimos que es casualidad
por no saberlo explicar
desvanecemos su intensidad
por distraernos en razonar
Estribillo
Hay encuentros sin agenda
otros son de programar
cuando el corazón comprende
la dicha habrá de llegar
Vibra el mundo en un instante
y el misterio se torna verdad
no para quienes vacilantes
dejan escapar la eternidad
Almas atentas al mensaje
disfrutan su luz cada día
la vida se torna paisaje
que trae felicidad y alegría