Eran cinco amigos

El tango siguiente, en el que se rinde homenaje a Carlos Gardel lleva
la misma musica que Silencio, el tango que el Zorzal Criollo hiciera
famoso en todo el mundo.

Silencio en la noche,
silencio en las almas,
ya nada perturba
la paz ni la calma.
La aurora amanece
trayendose en ancas
y el cielo se cubre
de negra borrasca.
Eran cinco amigos,
eran cinco glorias.

Eran cinco hermanos
llenos de esperanzas
buscando laureles
en tierras lejanas;
mientras sonreian,
la muerte acechaba;
eran cinco hijos
de la patria amada.

Silencio en la noche,
silencio en las almas;
de pronto un rugido
destruye la calma,
un chocar de aviones,
se envuelven en llamas
y al grito de salve…
Los nuestros se matan,
cubriendo de luto
nuestra tierra Pampa.

El tango malevo se vistio de duelo
San Telmo y Barracas por Carlitos lloran
y en los arrabales el taita compadre
enluto su viola con cinco crespones,
y rezo por ellos un salve y un credo.

Silencio en su tumba que Carlitos duerme,
que nadie perturbe ese sueño eterno.
Cerraste el pico, jilguero criollo,
dejando tu trino en tierras lejanas.
Silencio, que ha muerto el cantor más taura.