Con el alma herida
por un mal cariño,
que sin condiciones
le entregué mi amor.
Llevo ya tres días
en esta cantina,
tres días encerrado
tomando licor.
Un mariachi toca…
yo sigo tomando
y vuelvo a pedirles
«la misma canción».
Esto que me pasa
no es nada envidiable
ni al peor enemigo
se lo deseo yo.
Toquenme mariachis…
otra vez «la misma»,
esa que me hiere
hasta el corazón,
«El abandonado»
tóquenla de nuevo…
toquenme cien veces
la misma canción.
Aquí está su cuenta
me dice un mesero
ya me debe mucho
págueme señor…
El mariachi dice,
ya estamos cansados
yo sólo contesto
háganme un favor.
Pa’ variar un poco
tóquenme «la misma»,
esa que me hiere
hasta el corazón,
«El abandonado»
tóquenla de nuevo,
tóquenme cien veces
la «misma Canción»