La rechiflada

Julian Centeya

Siempre te rechiflas; por cualquier cosa
la broncas y te da por el ataque.
Una cheno cualquiera con un saque
te vi’a dejar de cama bien mormosa.

Ya no te aguanto mas, María Melato,
esgunfio como estoy le doy un corte,
buscate urgentemenet quien soporte
tu neurastenia gris. Este es mi trato!

La naifa lo escucho, y dulcemente
le clavo la mirada frente a frente
poniendole una noma en la cabeza.

Con un hilo de voz, sin espamento,
le dijo al breon que andaba en movimiento:
«Anda, chabon… barreme la pieza…»