Esta tonada antigua proviene de la región Española de Andalucia. Las
Estudiantinas pasaban por las noches cantando versos diciendo:
Adios, castillo de flores,
adios, castillo de flores,
adios Málaga, la bella.
Aunque me ausente de tí,
mi corazón en tí se queda,
mi corazón en tí se queda.
Desde lejos he venido,
desde lejos he venido,
pisando espinas y abrojos.
Solo por venirte a ver
malagueña de mis ojos,
malagueña de mis ojos.