Letra de Enrique Cadícamo
Música de José Padula
Mi vida es una mueca triste
Mi vida es una antigua herida,
Mi vida es un eterno andar y rodar
por las calles muy solo y suspirando…
Por eso como las hojas secas
es mi alma de errante peregrino…
Mi vida fue aroma
de un florido rosal que hoy
tan solo es perfume mortal…
Amé unos ojos claros de embrujos muy raros
Amé unos ojos llenos de dulces beleños
mas en sus aguas mansas flotó mi fantasía
Solo cenizas de pasión
quedaron de ese gran amor
que fue el tesoro de los dos.