No cantes víctoria (tango)

Letra de Juan Bautista Fulginitti
Música de Juan Espumer

Intérprete: Agustín Magaldi
«La Voz Sentimental de Buenos Aires»
Cassette music-hall dm-m- 50-4.004

Vencido por el fuego, de aquel amor ideal,
que me inspiró el encanto, divino de tu ser,
como un reptil inmundo, llegue hasta el lodazal,
donde tenía un precio, tu cuerpo de mujer.
Te había imaginado, tan noble como fiel,
después de aquella triste y amarga confesión,
que ciego bajo las garras, de tu cariño cruel,
como un vulgar suicida, dejé mi corazón.

bis

Pero, no cantes victoria,
porque hayas echado buena,
que también tus negras penas,
en las cartas del placer,
vos naciste para el barro,
y aunque sientas sultana,
si no es hoy, será mañana,
pero al barro has de volver.

El lujo que hoy envuelve, tu cuerpo aculturado,
lo que es sin duda el fruto, de otro mentido amor,
te hace olvidar que un día, fuiste a un hospital,
y en el, junto a tu lecho, lloré por tu dolor.
También hoy hace un año, que en la amargura atroz,
de esta prisión deliro, por verte y comprendí,
que solo has de sentirme, cuando en el mundo a vos,
te paguen con el cobre, que me has pagado a mi.