Letra de Julio Sosa
Música de Leopoldo Federico
Del Libro «Dos Horas Antes del Alba»
Si te quiero preguntas,!no me pidas amor!,
ni busques en mis ojos la respuesta,
mi corazón de ayer, ya no despierta,
dormido para siempre en su ostracismo,
y en la caverna esteril de mi pecho,
no puede amar a nadie, ni a mi mismo..
caliente el lecho aun, ya estabas muerta,
!no me pidas amor!,!esa es la puerta!,
lleva tus besos y el calor de tu piel miel y azucena,
a quien pueda ofrecerte no una pena,
sino un alma vibrante de deseo,
un corazón que lata con el tuyo,
unas manos de carne, no de yeso,
no pidas un amor que ya he perdido,
al pisar los umbrales de mi hombria…
Solo puedo ofrecerte,
de la noche más triste su neblina,
y tu mereces luz, tu necesitas,
lo que quise salvar y no he podido,
una fe siempre joven, sin heridas…
Que más puedo ofrecerte que esta alcoba,
con huellas de otro amor que quedo obscura,
a si mezclar, bestial, cobardemente,
tu inutil esperanza y mi locura…
!Vete pronto de mi!,!borra este dia!,
y el sabor de los besos mentirosos,
que puse entre tus labios anhelantes,
en el instante gris que fuiste mia…
!No me pidas amor!, cierra los ojos,
e imaginatme muerto o muy lejano,
viviendo solamente de un recuerdo,
que ayer me hizo feliz y hoy me hace daño…
Muchacha, vete ya, ponte el tapado,
la tarde esta muy fria,
y el sol se ha desmayado en el ocaso,
camina lentamente calle abajo,
y encontraras, talves en una esquina,
la luz de otro querer, bueno y honrado,
!no me pidas amor!, nada ha quedado,
de la sonrisa facil que he perdido,
del venturoso ayer que me han robado,
!no me pidas amor!, pideme olvido…