Nueve de julio (I)

Letra de Ricardo M. Llanes

Hubo varias letras del tango NUEVE DE JULIO. Esta es la primera,
cantada en Asunción del Paraguay por Juan Carlos Marambio Catan en
1916, y más tarde en Buenos Aires por Pascual Contursi, a quien
Francisco García Giménez, historiador del tango, citó erroneamente
como autor. Otras letras totalmente diferentes fueron escritas por
Lito Bayardo y Eugenio Cárdenas.

De un conventillo mugriento y fulero,
con un canflinflero te espiantaste vos;
abandonaste a tus pobres viejos
que siempre te daban consejos de Dios;
abandonaste a tus pobres hermanos,
tus hermanitos, que te querian!
abandonastes el negro laburo
donde ganabas el pan con honor.

Y te espiantaste una noche
escabullida en el coche
donde esperaba el bacan;
todo, todo el conventillo
por tu espiante ha sollozado,
mientras que vos te has mezclado
a las farras del gotan;
a donde has ido a parar!
pobrecita milonguera
que soñaste con la gloria
de tener un buen bulin;
pobre pebeta inocente
que engrupida por la farra,
te metiste con la barra
que viue en el café.in.

Tal vez mañana, piadoso,
un hospital te de cama,
cuando no brille tu fama
en el salon;
cuando en el «yiro» no hagas
más «sport»,
cuando se canse el cafisio
de tu amor:
y te espiante rechiflado
del bulin;
cuando te den el olivo
los que hoy tanto te aplauden
en el gran café.in.

Entonces, triste con tu decadencia,
perdida tu esencia,
tu armor, tu champang;
solo el recuerdo quedará en tu vida
de aquella perdida
gloria del gotán;
y entonces, pobre! con lagrimas puras,
tus amarguras derramarás;
y sentirás en tu noche enfermiza,
la ingrata risa del primer bacán.