Letra de Hugo Nicolás Taglia
Un árbol azota la penumbra y su melancolía
Contra el ventanal vetusto su desdén vacío
Del bar más austral y corsario
Sus remolinos ciudadanos
De bandoneones inusitados
Entre mocasines apócrifos y tardíos,
Atriles de madera tallada
Seducen corpiños enardecidos
Y osadías crepusculares contráctiles
En tu fueye dionisíaco acorralado
Por ninfas de virginidad clandestina
Evocas sortilegios de lo obvio
En el asfalto irregular de los peñascos
Con tu mosaico de pulsión empedernida,
Una nostalgia te apuñala corazónadas
Un efímero clamor mundano
Destroza melodías suburbanas
El arrabal pernocta en su arrullo senil
El sudor y la adrenalina rebotan
En la percusión marrón Del Plata
Se sentencia lo que acaso ignoramos
Donde el dolor líquido todo lo profana
Con licor de noches insoladas
Donde mujeres hábiles en emociones fáciles
Esperan la danza de las desilusiones
Entre religiones donde los facones
Describen parábolas inconclusas
En su rutina de desmayos y ovaciones:
He aquí su fuga al laberinto
Porque la muerte astuta no ha sido
Sino el compás lacónico y preciso
Con el cual tu bandoneón te ha definido .