Presentimiento (II)

Emilio Pacheco

Sin saber que existias te deseaba,
antes de conocerte te adiviné.
Llegaste en el momento en que te esperaba,
no hubo sorpresa alguna cuando te hallé.
El día que cruzaste por mi camino,
tuve el presentimiento de algo fatal.
Esos ojos me dije son mi destino
y esos brazos morenos son mi dogal.