Letra de A. Munilla
Música de O. Romanelli
Como una serpentina de rapido trayecto,
cruzas por los salones derrochando al pasar,
todos los cascabeles de tu risa nerviosa
que prenden en el alma alegria fugaz.
La sutil percalina de tu historico traje,
se agita como un ala que temblara al danzar,
la graciosa gavota que murmura la orquesta,
mientras un caballero te repite su afan.
Sacate el antifaz, Marquesa de Trianon,
quiero mirar tu faz y darte el corazón,
debe de ser un sol tu rostro angelical,
te ruego por favor, sacate el antifaz.
Esmaltada muñeca, de los hombres mimada,
en medio de las risas y en las vueltas de un vals,
va quebrando la rosa de pasiones ardientes,
que quedan a tus plantas y la recogeras.
A la luz de la luna, en un banco de sombra
un galan atrevido te conduce y alli,
olvidando el bullicio que alborota la sala
con vez desfalleciente, te vuelve a repetir.
Sacate el antifaz, Marquesa de Trianon,
quiero mirar tu faz y darte el corazón,
debe de ser un sol tu rostro angelical,
te ruego por favor, sacate el antifaz.