Letra de F. Brancatti
Música de Enrique Maciel
Señor… yo soy un desdichado
enfermo estoy de tanto padecer,
yo soy un paria que sufre resignado
abandonado, sin dichas ni placer.
Morir, asi sera mi estrella…
que debo hacer? mi vida esta demas
Ves señor? yo voy buscando a ella
sin saber donde encontrar mi santa paz.
Era mujer veleidosa
su gesto me lo decia
y el alma se me partia
porque por ella sentia
un cariño abrasador.
Pero llego mi derrota
para mi martirio cruento
y en ese golpe violento
perdi la fe y el aliento
se lo juro por mi honor.
Berbe? en mi ni esto es consuelo
no he de apagar con eso mi dolor,
van muchas noches que sufro y me desvelo
pidiendo al cielo mi ya perdido amor.
Tal vez usted que es hombre sabio
ha de saber que ruta he de tomar,
concedame su calido consejo buen Señor,
no es cierto que morir es descansar?
El alcohol no me adormece
el recuerdo de la ingrata
Ese vicio nunca mata
la tormenta que desata
el volcan de una traicion.
Por la mujer agresiva,
tan desleal y peligrosa
en mi vida borrascosa,
una muerte lastimosa
pondra fin a mi pasion.